Hace muchos años que no se veían lluvias como las que tuvimos este año, el verano volvió regular la lluvia de la tarde, como decía mi padre que fue en su infancia: mañanas frescas y soleadas en las que se juntaban las nubes que se oscurecían hasta que avanzaba la tarde y soltaban su carga.
Hay expresiones que se han atribuido a ciertos personajes históricos en momentos particulares y que, en el mejor de los casos, resulta difícil corroborar que en efecto lo dijeron; si no es que, posteriormente, se demuestra que esas palabras jamás fueron expresadas por el personaje en cuestión —un caso típico es el Qu’ils mangent del brioche/” que coman pasteles”, adjudicado a María Antonieta, aunque, jamás se ha demostrado que lo haya dicho—.
¡No sé qué fuerza me ha empujado de nuevo hacia usted!
¡Uno se deja arrastrar por lo que es bello, encantador, adorable!
Madame Bovary, Segunda parte, capítulo IX
Vladimir Nabokov dijo en su Curso de literatura europea: “Gógol definió su obra Las almas muertas como un poema en prosa; la novela de Flaubert también es un poema en prosa; pero mejor compuesta, con una textura más firme y bella”.
Esta hasta nuestra edad anduvo suelta, y fuera de regla, y a esta causa a recebido en pocos siglos muchas mudanças; por que si la queremos cotejar con la de oi a quinientos años, hallaremos tanta diferencia y diversidad cuanta puede ser maior entre dos lenguas.
Belleza y honestidad,
y dolor y piedad vivientes en el mármol muerto,
por favor, ¿cómo pudiste hacerlo?,
no llores tan fuerte,
que antes del tiempo despertará de la muerte,
y no obstante, a pesar suyo,
Nuestro Señor es tu
esposo, hijo y padre,
única esposa su hija y madre.