Hay libros que se constituyen en la teoría y aparecen como espectros en los modos de vida; palabras que archivan un secreto, signos a punto de confesar algo.
Sol Ceh Moo, la primera escritora en ganar el Premio de Literaturas Indígenas de América (PLIA), busca que otras personas se reflejen en su vida: que se animen a escribir en sus lenguas originarias y vislumbren que más allá del peso del racismo y la discriminación, está la trascendencia.
En más de un par de ocasiones he contado que cuando migré a la ciudad de Jobel comencé a usar la máscara de “indígena” para identificarme ante los dueños de ese mundo.