Traducción

Confesiones de un (pobre) traductor

a los Oberg, familia de traductores Traducir es hacer un viaje por un país extranjero George Steiner De cierta forma el mejor traductor de un libro es un buen árbitro: el éxito de su trabajo depende de su habilidad para hacerse invisible.

Alenka Zupančič: la impar, la extraña

Traducir es generalmente una labor ingrata y que brinda poco o nulo renombre.

De la infidelidad como vocación: Panna María y sus...

Anda, Peláez, ve diciendo cómo te ha ido con Brígida.

A sus cuerpos dispersos

I SU ESPOSA lo había sujetado entre sus brazos como si pudiera alejar a la muerte de él.

Panna María

I LAS CHICAS DEL HORATIO, 1907 NO ERA en Bridgeport ni en Horatio House donde Christina vivía junto a otras nueve mujeres; era en un edificio de ladrillo con lámparas de cobre en el tejado.

Diez días en un manicomio XVI

Aquí puedes leer el capítulo XV CAPÍTULO XVI La última despedida     El día que trajeron a Pauline Moser al manicomio, escuchamos unos gritos desgarradores y una chica irlandesa, vestida a medias, vino tambaleándose por el pasillo como como si estuviese borracha al tiempo que gritaba: “¡Viva! ¡Tres hurras! ¡He matado al diablo! Lucifer, Lucifer, Lucifer.

Diez días en un manicomio XV

  Capítulo XV Incidentes de la vida en el manicomio     Hay muy pocas maneras de pasar el tiempo en los pabellones.

Diez días en un manicomio XIV

  Capítulo XIV Algunas historias desafortunadas     Para este momento ya había conocido a la mayor parte las cuarenta y cinco mujeres en el Pabellón 6.